La finalidad de la Educación Infantil es la de contribuir al desarrollo integral y armónico del alumnado en todas sus dimensiones: física, emocional, afectiva, social, cognitiva y artística, potenciando la autonomía personal y la creación progresiva de una imagen positiva y equilibrada de sí mismos, así como la educación en valores cívicos para la convivencia.
El proceso de enseñanza-aprendizaje deberá entenderse desde un punto de vista integrador y de construcción del aprendizaje, que fomente el razonamiento inductivo y la capacitación del alumnado para generar sus propios conocimientos.
Para ello, la práctica educativa buscará desarrollar y asentar progresivamente las bases que faciliten el máximo desarrollo de cada niño y de cada niña, teniendo en cuenta sus procesos madurativos individuales y partiendo de sus conocimientos, ideas previas, necesidades e inquietudes. Además, se basará en experiencias de aprendizaje significativas y emocionalmente positivas, en la experimentación y en el juego. Deberán llevarse a cabo en un ambiente de afecto y confianza para potenciar su autoestima e integración social y favorecer el establecimiento de un apego seguro. Es fundamental garantizar una transición positiva desde el entorno familiar (a través del establecimiento de una relación de cooperación con las familias) al escolar, así como la continuidad entre ciclos.
En toda la etapa de Educación Infantil, se atenderá progresivamente al desarrollo afectivo, a la gestión emocional, al movimiento y los hábitos de control corporal, a las manifestaciones de la comunicación y del lenguaje, a las pautas elementales de convivencia y relación social, al descubrimiento del entorno, de los seres vivos que en él habitan y de las características físicas y sociales del medio en el que viven. Se incidirá en la educación en valores, la educación para el consumo responsable y sostenible y la promoción y educación para la salud.
También se fomentará la inclusión de todos los lenguajes para desarrollar al máximo las capacidades del alumnado, respetando la cultura de la infancia que define la Convención sobre los derechos del Niño y las Observaciones Generales de su Comité.
De igual modo, teniendo en cuenta las características evolutivas del alumnado de esta edad, se favorecerá una primera aproximación a la lectoescritura y a la lengua inglesa, así como la realización de experiencias relacionadas con la iniciación en las habilidades numéricas básicas y las tecnologías de la información y la comunicación, la expresión visual, musical y psicomotriz, desde una perspectiva vivencial.
Con el fin de garantizar los principios de equidad e inclusión, la escuela infantil atenderá a la compensación de las desigualdades, sea cual sea su origen (cultural, social y económico), y a la detección precoz y atención temprana de posibles dificultades y necesidades específicas de apoyo educativo. Por ello, las medidas organizativas, metodológicas y curriculares que se adopten deben regirse por los principios del Diseño Universal de Aprendizaje (DUA).
El DUA es un enfoque educativo que tiene como objetivo identificar barreras en el aprendizaje y promover propuestas basadas en la verdadera inclusión. Se trata de un modelo que parte de la diversidad desde el comienzo de la planificación didáctica y tiene como propósito lograr que todo el alumnado tenga oportunidades para aprender.
Teniendo como referencia todos los principios mencionados, los objetivos generales de la Educación Infantil son:
- Conocer su propio cuerpo y el de los otros, así como sus posibilidades de acción y aprender a respetar las diferencias.
- Observar y explorar su entorno familiar, natural y social.
- Iniciarse en el conocimiento de las ciencias.
- Adquirir progresivamente autonomía en sus actividades habituales.
- Desarrollar sus capacidades emocionales y afectivas.
- Relacionarse con los demás en igualdad y adquirir progresivamente pautas elementales de convivencia y relación social, así como ejercitarse en el uso de la empatía y la resolución pacífica de conflictos, evitando cualquier tipo de violencia.
- Desarrollar habilidades comunicativas en diferentes lenguajes y formas de expresión.
- Aproximarse e iniciar el aprendizaje de una lengua extranjera.
- Iniciarse en las habilidades lógico-matemáticas, en la lectura y la escritura, y en el movimiento, el gesto y el ritmo.
- Promover, aplicar y desarrollar las normas sociales que fomentan la igualdad entre hombres y mujeres, favoreciendo el logro de una sociedad libre e igualitaria.